Oh! U're chic*!

Cada vez que salgo de compras o a comer con mis amigos, me fijo en toda la ropa que hay a mi alrededor (lo siento, pero no puedo evitarlo) y fue hace unos meses cuando se me ocurrió la idea en mi antiguo blog de sentirme Sartorio o Chic too Chic por un día. El caso es que desde entonces no he podido parar y ya no sólo me fijo en la gente, sino que las fotografío para enseñaros el estilo más natural y fresco de las calles de Sevilla. Lo que empezó como un simple post de moda por la calle se ha convertido en una importante parte de mi blog.

Bueno, el primer chic* boy que encontré fue en Zara Man. ¿Recordáis su reloj?

Bien, pues estaba yo de compras con unos amigos cuando lo vi y decidí acercarme.

- Perdona, ¿tienes un minuto?

- Sí claro, dime.

- Mira, es que tengo un blog de moda y de vez en cuando fotografío a gente que me gusta cómo va vestida. ¿Te importa si te hago una foto?

- ¡Vale! Pero... ¡si hoy voy fatal! Además, es que solo me da vergüenza. ¿Me la puedo hacer con tu amiga?

- Mmmmmmhh... ¿te importa Aida?

Of course que a mi amiga no le importaba. Se colocaron uno al lado del otro delante de la ventana y posaron para mí.

Cárdigan azul marino sobre camiseta blanca, pitillos vaqueros, zapatos de punta negros, maxi-pulsera de 1 de 50, reloj de Zara y gafas de aviador. Y lo que más me gustó... su bolso de H&M.

- Muchas gracias. Mira, esta es la dirección de mi blog. Ya me contarás cuando lo veas.

- Vale. Oye, me encanta tu reloj.

- Y a mí el tuyo.

Unas sonrisas y cada uno por su lado.

Por cierto, antes de salir de Zara Man, vi un reloj increíble. Yo creo que el más chic* del universo. Así que ya sabéis, dejad de buscar el reloj perfecto porque lo tengo yo*

Ya de noche, cuando veíamos las últimas tiendas antes de que cerraran, pasamos por delante de la chica de esta bota.

Al principio seguimos adelante, pero yo me quedé pensando. Y se ve que mis amigos también, porque todos nos paramos a la vez y nos miramos. Sin dudarlo, me acerqué a ella. Bueno, a ellos.

- Hola. ¿Tienes un minuto?

- Sí, dime.

- Mira, es que me gustaría sacarte una foto para mi blog de moda. ¿Te importaría?

- Ahh, claro que no. ¿Dónde me pongo? ¿Aquí está bien?

- Perfecto. Me encanta tu perro, ehh?

- Jajaja. Gracias.

Charlamos un rato, le di la dirección del blog y me fui muy contento de haberlos fotografiado.

¿No creéis que es el perro más chic* del mundo? A juego con su dueña.